Se tiende a confundir e incluso se piensa que puede ser lo mismo…pero no. Vamos a ver un poco más en detalle que es una persona con altas capacidades y su relación con las personas altamente sensibles:
¿Que son las alta capacidades?
Las altas capacidades, también conocidas como superdotación o sobredotación intelectual, se refieren a la presencia de habilidades cognitivas excepcionales en una o varias áreas, en comparación con la mayoría de la población. Esto incluye habilidades como el razonamiento lógico-matemático, la capacidad verbal, la creatividad, la memoria, la resolución de problemas, la capacidad de aprendizaje rápido, entre otras.
A menudo, se considera que una persona tiene altas capacidades si su coeficiente intelectual (CI) está por encima de 130 en una prueba estandarizada. Sin embargo, el CI no es la única medida de las altas capacidades, y algunas personas con altas capacidades pueden tener un CI inferior a 130.
Es importante tener en cuenta que tener altas capacidades no significa necesariamente que una persona tenga éxito en la vida o sea feliz. Las personas con altas capacidades también pueden tener desafíos únicos, como el aburrimiento en la escuela, la falta de desafío intelectual, la dificultad para adaptarse socialmente, entre otros. Por lo tanto, es importante identificar y apoyar a las personas con altas capacidades de manera adecuada y holística.
¿Son lo mismo?
Las altas capacidades y las personas altamente sensibles (PAS) son dos características que a menudo se confunden entre sí, pero son distintas.
Las personas con altas capacidades tienen una capacidad cognitiva excepcional en uno o varios campos, mientras que las personas altamente sensibles tienen un sistema nervioso más sensible y reactividad emocional más intensa, lo que significa que pueden sentir y percibir las cosas de manera más profunda que la mayoría de las personas.
Sin embargo, es posible que algunas personas tengan ambas características: ser altamente sensibles y tener altas capacidades. Estas personas pueden tener una capacidad excepcional para procesar y analizar información, pero también pueden sentir y percibir de manera más profunda que la mayoría de las personas. Esta combinación puede ser una fuente de fortaleza y también puede presentar desafíos únicos.
En cualquier caso, es importante que tanto las personas con altas capacidades como las personas altamente sensibles reciban el apoyo adecuado para desarrollar sus habilidades, manejar sus emociones y prosperar en sus vidas.
¿Cómo saber si tienes altas capacidades?
Determinar si una persona tiene altas capacidades puede ser un proceso complejo y requiere una evaluación completa de las habilidades cognitivas y el rendimiento académico y social. Si crees que puedes tener altas capacidades, puedes considerar tomar medidas para obtener una evaluación formal. Algunas opciones para obtener una evaluación de las altas capacidades incluyen:
Realizar una prueba estandarizada de inteligencia, como el Test de Inteligencia de Stanford-Binet (SB-5) o el Test de Inteligencia de Wechsler para Adultos (WAIS-IV).
Buscar una evaluación neuropsicológica, que puede evaluar habilidades específicas, como la memoria, la atención y el procesamiento visual-espacial.
Buscar una evaluación psicológica o educativa completa, que puede incluir una variedad de pruebas y evaluaciones para evaluar el rendimiento académico, las habilidades cognitivas y la adaptación social y emocional.
Además, es posible que desees hablar con un profesional de la salud mental, como un psicólogo, para obtener más información sobre las altas capacidades y para discutir tus inquietudes y preguntas. También puedes buscar recursos y apoyo en organizaciones especializadas en altas capacidades.