¡Lo que nos gusta la soledad a las personas altamente sensibles! Y no, no hablo de esa soledad de connotaciones negativas. Hablo de la soledad deseada, de la soledad querida, de la soledad prácticamente necesitada. En muchas ocasiones me han dicho que soy alguien solitario porque el sencillo motivo, de que necesito esos momentos para mi conmigo. Y de hecho, no es nada malo tenerlos. Estas son tan solo algunas razones pro las que la soledad en personas altamente sensibles es algo bueno y deseado:
Autoconocimiento
Estar solo proporciona un espacio tranquilo y libre de distracciones para explorar tus propios pensamientos, emociones y deseos. Te brinda la oportunidad de conocerte a ti mismo en un nivel más profundo, entender tus fortalezas y debilidades, y desarrollar una mayor claridad sobre tus metas y valores personales. Es decir, te brinda el regalo de aprender a conocer quien eres, de donde vienes y a dónde vas.
Libertad y autonomía
Estar solo te permite tener la libertad de tomar decisiones sin tener que negociar con otras personas. Puedes elegir cómo pasar tu tiempo, qué actividades realizar y qué metas persigues, sin tener que comprometerte con los deseos o expectativas de los demás. Esta autonomía puede llevar a un mayor sentido de empoderamiento y satisfacción personal.
Tiempo para la autorreflexión
La soledad ofrece la oportunidad de reflexionar sobre tu vida, evaluar tus experiencias pasadas y aprender de ellas. Puedes analizar tus acciones, metas y relaciones, lo que te permite realizar ajustes y mejoras en tu vida. La autorreflexión también puede ayudarte a desarrollar una mayor conciencia de tus emociones y pensamientos, promoviendo un crecimiento personal y emocional significativo.
Incremento de la productividad
Estar solo te brinda un entorno tranquilo y libre de interrupciones, lo que puede aumentar tu capacidad para concentrarte en tareas específicas. Puedes aprovechar este tiempo para realizar trabajos intelectuales, desarrollar proyectos personales o simplemente completar tareas diarias de manera más eficiente. Sin las distracciones sociales, puedes lograr un mayor nivel de productividad y lograr más en menos tiempo.
Independencia y fortaleza emocional
Pasar tiempo a solas puede ayudarte a desarrollar una mayor independencia emocional y fortaleza interior. Al aprender a disfrutar de tu propia compañía, te vuelves menos dependiente de la validación externa y más capaz de satisfacer tus propias necesidades emocionales. Esto te brinda una base sólida para relacionarte con los demás de manera saludable y establecer límites adecuados en tus relaciones.
Es importante tener en cuenta que, si bien la soledad puede tener ventajas, también es esencial mantener un equilibrio saludable entre el tiempo solo y el tiempo social. El contacto humano y las relaciones significativas son fundamentales para el bienestar emocional y el sentido de pertenencia. Y esque, al final, somos seres sociales. Necesitamos de los demás y los demás necesitan de nosotros.
En cualquier caso, esa necesidad de soledad en una persona altamente sensible no debe ser vista como algo raro, malo o diferente. Como ves, no son pocos los beneficios que nos aporta.